Autorretrato de Joaquín Sorolla

Joaquín Sorolla y Bastida
Valencia, 1863 – Cercedilla, Madrid, 1923
Fecha: 1885
Medidas: 26,40 x 13,90 cm
Materiales: Óleo sobre tabla
La obra presentaba un aspecto amarillento acusado, debido a la oxidación de una gruesa capa de barniz que había sido aplicada en alguna restauración antigua. Además, el soporte mostraba varias grietas verticales, que habían generado diversas pérdidas pictóricas en la pieza, habiendo sido reintegradas antiguamente con materiales poco respetuosos con la obra de arte. Durante el proceso de restauración, se ha procedido a la eliminación de dichos barnices, y a la retirada de repintes y estucos antiguos, sustituyéndolos por nuevos materiales, inocuos y más respetuosos con la pieza. Además, se ha procedido al recubrimiento de diversas lagunas pictóricas de la superficie pictórica. La restauración, ha ayudado a restituir las tonalidades originales con las que el autor de la obra, Joaquín Sorolla, ejecutó cada una de las pinceladas de la obra. Igualmente, ha ayudado a consolidar y a una mejor lectura de la inscripción realizada por el maestro valenciano. Además, también ha contribuido a una mejor lectura e interpretación de la obra, ayudando así a poder observar mejor las facciones del personaje retratado, el cual ha sido identificado por los investigadores del CAEM, como el propio Sorolla de joven. Tratándose así de uno de los primeros autorretratos del pintor que se conoce.