Se trata de una imagen mariológica donde se puede admirar la figura de medio cuerpo de la Virgen María velando el sueño del niño Jesús. Su cuerpecito desnudo sobre un paño blanco, reposa sobre una cruz de madera que a su vez se apoya encima de un cojín. Anteriormente, esta extraordinaria pieza estuvo atribuida al artista español Francisco Bayeu pero las pruebas técnicas y el estudio estilístico realizado en el CAEM han permitido reconducir su autoría al artista italiano Paolo de Matteis, talentoso discípulo del genio Luca Giordano.